Esta semana recibí con alegría la noticia de que la Asociación Abuelas de Plaza de Mayo recibirá el Premio Félix Houphouët-Boigny que otorga la UNESCO a las personas, instituciones u organizaciones destacadas en la búsqueda y promoción de la paz. Estoy convencido de que la lucha por la identidad, llevada adelante por Abuelas durante todos estos años, merecía esta distinción a nivel mundial, ya que quienes son capaces de sobreponerse y transformar el dolor en lucha, nunca en resentimiento ni en sed de venganza, son los verdaderos representantes de la paz.

Este reconocimiento es una recompensa por los más de 30 años que estas mujeres dedicaron a la búsqueda de los niños apropiados ilegalmente por la dictadura militar, a la vez que continúan peleando por sentar a cada uno de los genocidas en el banquillo de los acusados. Nunca con ánimos de venganza, sino con fe de Justicia.

Como ciudadano argentino y sobre todo como abogado tengo un fuerte compromiso con los derechos humanos. Desde el Colegio de Abogados del Departamento Judicial de Lomas de Zamora, institución que presido, apoyamos esta lucha con distintas acciones. Entre ellas, respaldamos la nominación para el Premio Nobel de la Paz, exhibimos una de sus muestras plásticas durante el mes de la memoria y adherimos a su campaña “Conocé tu verdad”, que tiene como objetivo recuperar la identidad de los nietos apropiados, a través de la difusión en todos los espacios institucionales.

En varias ocasiones tuve la oportunidad de compartir distintas actividades y asistir a conferencias encabezadas por la titular de la Asociación, Estela de Carlotto, y reconocí en ella a un emblema viviente de la lucha por la identidad, la memoria, la verdad y la Justicia.

Por eso celebro esta distinción de Unesco que como la gran mayoría de los argentinos, reconoce la lucha paciente y tenaz de las Abuelas por la recuperación de los nietos y sus historias. Esta distinción le otorga más fuerza al proceso de reconstrucción de la memoria que debemos cumplir para generar más conciencia de lo que no debe repetirse Nunca Más.